Perder una pieza dental puede parecer solo un problema estético, pero en realidad, su ausencia puede afectar la salud bucal y general de una persona. A continuación, te explicamos por qué es crucial reemplazar las piezas dentales ausentes lo antes posible.
1. Evita el desplazamiento de los dientes adyacentes Cuando falta una pieza dental, los dientes cercanos tienden a moverse hacia el espacio vacío, lo que puede generar desalineaciones y problemas de mordida. Esto no solo afecta la estética, sino que también puede causar dificultades al masticar y hablar.
2. Previene la pérdida ósea La raíz de una pieza dental estimula el hueso maxilar, manteniéndolo fuerte y saludable. Al perder una pieza dental, el hueso de la zona empieza a reabsorberse, lo que puede llevar a cambios en la estructura facial y una apariencia envejecida.
3. Mejora la función masticatoria Cada pieza dental juega un papel importante en la masticación. La ausencia de una o varias piezas puede hacer que el resto de la dentadura tenga que trabajar más, causando desgaste prematuro y molestias en la articulación temporomandibular (ATM).
4. Evita problemas digestivos Una masticación deficiente puede afectar la digestión. Los alimentos mal triturados dificultan la absorción de nutrientes y pueden generar molestias gastrointestinales.
5. Mantiene la estética y la confianza La falta de piezas dentales puede afectar la sonrisa y la autoestima de una persona. Reemplazarlas con implantes dentales, prótesis o puentes mejora la apariencia y permite sonreír con seguridad.
Actualmente, existen varias soluciones para reponer las piezas dentales ausentes. Si has perdido una pieza dental, consulta con tu dentista para encontrar la mejor solución para ti. ¡Tu sonrisa y tu salud lo agradecerán!
